Álter ego.
domingo 27 de mayo de 2007
Que conste que lo que viene a continuación, menos las frases, es un "collage" y a la vez una tesis para superar las oposiciónes de periodismo, entre otras. Espero que no sean mi vocación.
Sólo hay una fuerza motriz: el deseo. – Aristóteles.
La realización de las funciones básicas del organismo para mantenerse vivo, y el reproducirse; generan placer. En el inconsciente (Ello, Id), la búsqueda de éste es un impulso irresistible, necesidad. Tan inherente al ser es el instinto como la fuerza que lo mueve hacia el estado placentero de completitud.
En el ser humano se reconoce la existencia del (Yo, Ego, Ich), la conciencia. Por métodos tanto teóricos como empíricos, éste, media entre los impulsos y las ideas para realizarlas en el mundo sensible. Las creencias son el artificio que se usa en ausencia de explicaciones raciocinadas, que el ser humano es capaz de crear y utilizar, para alcanzar el fin de especulación individual o común: fe, religión…
El hombre es un animal social que desarrolla sus fines en el seno de una comunidad. – Aristóteles
La evolución del (Superyó, Super-Ego, Über-Ich) debe ser una obligación en la persona, para toda la comunidad; el medio para desarrollarla es la educación, pero no la misma que ahora conocemos. La educación debe ser mejorada por el propio individuo fundándose en sus conocimientos y raciocinio, nunca sin olvidar el deseo, puesto que el enfrentamiento entre Super-Ego e Id puede engendrar una crisis emocional, depresión, paranoia, esquizofrenia… en el peor de los casos.
El egoísmo mantiene a la sociedad competitiva en la que vivimos, nunca debería ser de esta misma condición, en una razonablemente justa y debidamente educada agrupación natural de seres humanos o sociedad.
Donde hay educación no hay distinción de clases. – Confucio
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