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La Teogonía – Hesíodo

La Teogonía – Hesíodo (Pasaje) Mas Zeus y los otros inmortales que Rea, la de hermosa cabellera, había concebido de Cronos, los sacaron nuevamente a la luz por consejo de la Tierra; la cual, al enterarles detalladamente de cuanto era opuesto, les aseguró, que con ellos conseguirían vencer y ganarían espléndida gloria. Pues hacía mucho tiempo que luchaban con dolorosa fatiga, los dioses Titanes y los engendrados por Cronos; y entre aquéllos y éstos se daban ásperos combates, sostenidos desde las alturas del Otris por los ilustres Titanes y desde el Olimpo por los dioses, dadores de los bienes, a quienes había dado a luz Rea, la de hermosa cabellera, después de acostarse con Cronos. Poseídos de dolorosa ira los unos contra los otros, batallaron incesantemente por espacio de diez años enteros, sin que ninguna de las partes consiguiese hallar solución ni dar fin a la grave contienda, porque los resultados de la lucha fueron iguales para entrambas. Mas, cuando Zeus dio a aquéllos

Audio - Libros - Aprendiendo de los originales

Así habló Zarathustra - F. W. Nietzsche Audiolibro https://www.youtube.com/watch?v=DlnPixMVdnE Libro http://www.wissensnavigator.com/documents/zarathustra.pdf Apología de Sócrates - Platón Audiolibro https://www.youtube.com/watch?v=VeduIpglkrg Libro http://www.schooltime.gr/wp-content/uploads/2013/03/apologia-sokratous_platon.pdf

Bach's St. Matthew Passion

http://www.gbt.org/music/St_Matthew_text.pdf

Uhm, ella

Cuán infante era cuando se leyó ella sola las fábulas de Esopo. Le tentó como a algunos el mito de la Ilíada de Homero y abstrajo batallas épicas entre dioses y titanes con la Teogonía de Hesíodo. Pudo alertar a la gente como un perro, como el mismo Diógenes de Sinope, el Cínico, pero no lo hizo. Casi llegó a abandonarlo, maldecirlo todo y refugiarse en una cueva sobreviviendo de las raíces tal y como lo hizo el misántropo Timón de Atenas de Shakespeare. Impresionó al mismo Nietzsche, homónima de Zarathustra cuando se halló en la cima de aquella montaña durante diez años , como lo hizo el Manfred de Lord Byron al experimentar aquella absoluta soledad. Bromeó e ironizó con todos como lo solía hacer Alcibíades más cuando se ponía seria. Dialogó como el mismo Sócrates, aprendió de él y filosofó como Platón y Aristóteles. Hacía también acto de presencia como un escolástico en pleno medievo, como un Spinoza o el mismo Leibniz. Percibió el bien a través de la sabiduría y el dominio del alm

Hable

Lo inefable es honorable para el razonable inestable que soy yo, inexpugnable, sólo revelable por la irrefrenable, inagotable relación incansable impagable contigo agradable. Imborrable recuerdo no desdeñable, sí insondable, imaginable indispensable para mí, insuperable, inescrutable y comunicable. Ineluctable tú y nuestro inestimable recuerdo, inadaptable y transmutable por amor infranqueable, inalterable, confortable responsable, verificable, inigualable, indescifrable, practicable indisciplinable, indomesticable, impostergable, incuestionable. Para ti y para mí lo variable, incontable del tiempo infranqueable para los demás injustificable es inconmensurable. Después de todo seguiré siendo un miserable pero bendígame con un hijo o hija y éste será formidable.

Homo Deus

http://www.elmundo.es/papel/historias/2016/12/01/583c6470e2704e4c798b458f.html Entonces… Aquella voz femenina, mitad humana mitad robótica, hizo aparición en la reunión de aquellos semidioses también llamados Homo Deus:   – Encontrarlo es una prioridad, no debemos escatimar esfuerzos en su búsqueda –. Objetó la I.A. –Así es–. Añadió el semidiós Zeus. –Entonces nos ocuparemos de las revueltas más tarde, cuando éste esté a buen recaudo–.  Dijo la semidiosa Atenea. –Así sea–. Sentenció el semidiós Ares. Con estas palabras se dio por concluida la reunión y el técnico, temblando su falange, presionó un botón que rápidamente cortó la comunicación con el emisario que se habría de ocupar personalmente del trabajo.    Relacionado:  https://acendrado.blogspot.com.es/2016/11/presentado-concurso-relato-corto.html