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Mostrando entradas de noviembre, 2018

Globalización; migración e identidad.

Hay países como España en los que somos reacios, mostramos nuestra negativa a aceptar la idea de Globalización de Soros entre otros; la libre circulación de gente de cualquier índole o lo que sea. Esa idea es para el de «Un Mundo Feliz» y sé que ustedes les han inculcado a sus hijos la mejor de las educaciones y luego les han dicho ya de mayores: «Con quien sea, pero que sea bueno ». Pocos disfrutamos de una exquisita educación, respecto del que desprecia hasta a su propia gente, e insulta a sus propios ancestros, e, incluso, a los suyos (de usted); pocos somos más inteligentes que la media; pocos somos más altos, más lo que sea...; sin embargo, la mayoría no carece de ese sentimiento de pertenencia a su país, de eso que los une a su cultura, a sus costumbres y a sus ritos propios. Vivimos en un país que, si bien, en estos momentos no está del todo unido, es por el abundante ir y venir de gente con distintas raíces y, no, no es por el turismo, es sin lugar a dudas por la inmigrac

De la guerra y el pueblo guerrero (Así habló Zaratustra) [F.W. Nietzsche]

De la guerra y el pueblo guerrero No queremos que con nosotros sean indulgentes nuestros mejores enemigos, ni tampoco aquellos a quienes amamos a fondo. ¡Por ello dejadme que os diga la verdad! ¡Hermanos míos en la guerra! Yo os amo a fondo, yo soy y he sido vuestro igual. Y yo soy también vuestro mejor enemigo. ¡Por ello dejadme que os diga la verdad! Yo sé del odio y de la envidia de vuestro corazón. No sois bastante grandes para no conocer odio y envidia. ¡Sed, pues, bastante grandes para no avergonzaros de ellos! Y si no podéis ser santos del conocimiento, sed al menos guerreros de él. Éstos son los acompañantes y los precursores de tal santidad. Veo muchos soldados: ¡muchos guerreros es lo que quisiera yo ver! «Uni-forme» se llama lo que llevan puesto: ¡ojalá no sea un-formidad lo que con ello encubren! Debéis ser de aquellos cuyos ojos buscan siempre un enemigo - vuestro enemigo. Y en algunos de vosotros hay un odio a primera vista. ¡Debéis buscar vuestro enemigo, debéis hace

Sueño profundo y viajes astrales: parálisis del sueño.

Me levanté asustado, había un gran desconcierto en la calle con las bocinas de coches, autobuses, camiones, incluso alarmas de ambulancias y bomberos, la policía y la guardia civil. Me asomé a la ventana y debajo de mi casa se podían escuchar voces por walky talkie y radio. Pasaron varios aviones rasantes creí discernir que eran cazas por la velocidad a la que iban. Las campanas de la iglesia de mi barrio tañían incesantemente, más a lo lejos se podían oír las sirenas de colegios y fábricas. La guerra nuclear había comenzado. He aquí el clamor de las trompetas del día del juicio final. Un tenue resplandor seguido por otro grande irrumpieron en el cielo. Se podía ver allá a lo lejos lo que parecía una gran humareda. Momentos después, de repente, la leve brisa de aire se convirtió en un gran fuerte viento huracanado que rompió cornisas y ventanas, me impulsó hacia atrás, caí sobre la cama y seguidamente escuché un gran estruendo, como el de un rayo a mi lado, era como un terremoto (t

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Este site por fin es seguro. Atrás quedaron los años de oscuridad en la web profunda y oscura. Pronto se podrá ver este blog en el buscador de Google, cuando yo lo permita.

Ecce Homo - Friedrich Nietzsche (Fragmentos)

ECCE HOMO - Friedrich Nietzsche Fragmentos ¿Por qué soy tan sabio? III Considero un gran privilegio el haber tenido el padre que tuve: los campesinos a quienes él predicaba –pues los últimos años fue predicador, tras haber vivido algunos años en la corte de Altenburgo– decían que un ángel habría de tener sin duda un aspecto similar. Y con esto toco el problema de la raza. Yo soy un aristócrata polaco pur sang [pura sangre], al que ni una sola gota de sangre mala se le ha mezclado, y menos que ninguna, sangre alemana. Cuando busco la antítesis más profunda de mí mismo, la incalculable vulgaridad de los instintos, encuentro siempre a mi madre y a mi hermana. Creer que yo estoy emparentado con tal canaille [gentuza] sería una blasfemia contra mi divinidad. El trato que me dan mi madre y mi hermana, hasta este momento, me inspira un horror indecible: aquí trabaja una perfecta máquina infernal, que conoce con seguridad infalible el instante en que es posible herirme cruentamente, en